¿ Has oído hablar de comida emocional? Seguramente sí. En el artículo de hoy hablaremos de ella.

También llamada comida confortable o comfort food; se refiere a ciertos alimentos que nos provocan bienestar emocional o confort emocional. Es decir las comemos para sentirnos mejor, para generar bienestar……
La comida emocional genera bienestar por dos grandes causas. La primera es porque es muy fácil su preparación. Y la segunda y más importante es la causa sentimental o nostálgica.

Naturalmente que la comida emocional es diferente si se trata del sexo femenino o masculino: Veremos luego cuales son esas diferencias ¿Me acompañan?
Pero antes veremos que en ambos sexos existen similitudes. En todos  por regla general la comida emocional es absolutamente palatable ( es decir sabrosas ) con gran contenido de grasas, harinas y azúcares. Las llamadas carbograsas (dulces o saladas). En cuanto a las diferencias podemos decir lo siguiente:

La comida emocional en el hombre

El varón prefiere las comidas caseras. Probablemente debido a reminiscencias nostálgicas de origen materno. Entonces como comida emocional preferimos pastas los domingos, postres caseros, guisos, milanesas etc. Siempre, pero siempre tienen la característica hogareña, el toque familiar.

La comida emocional en la mujer

En este caso la preferencia es bastante diferente. Las mujeres prefieren la comida hecha. Les gusta salir a comer, delivery o comprarla en la rotisería. Se prioriza evitar el trabajo a cocinar, como premio, privilegiando la salida.

Comida emocional: Un ejemplo de todos los días

Cuando los niños prefieren las hamburguesas de Mc Donald ‘s. ¿ Lo hacen por su sabor? Seguramente no. El sistema ideado es perfecto. Recibes la cajita feliz, en un ambiente de colores y payasos. Todo este ambiente de felicidad familiar creado alrededor de una mediocre hamburguesa es lo que te lleva en el fondo a preferirla de niño.
Luego de adolescente intentarás repetir esa alegría y ya no irás con tus padres, sino con tus amigos. Y luego ya de adulto obviamente llevarás a tu hijo. Perpetuando el hábito de generación en generación.
De esta manera es como la empresa se asegura millones y millones de hamburguesas vendidas.

Comida emocional: Conclusiones

Como conclusión final podemos decir que no solo comemos por hambre. La comida emocional es una prueba de ello. El consumo de alimentos confortables se ha visto asociado a situaciones de stress. Y naturalmente, como el stress es moneda corriente en estos días, la comida emocional y la selección de alimentos que nos producen bienestar es utilizado por todos nosotros como una forma de medicación para cuando estamos angustiados, tristes, nerviosos o ansiosos.
Esta es una de las causas por las cuales, un papel impreso,una dieta, indicándotelo que tienes que comer, la mayoría de las veces no funciona. Porque precisamente no tiene en cuenta la comida emocional.
Recuerda siempre esto: “Las personas no solo comemos por hambre”

Les dejo un nutrisaludo y nos vemos la semana que viene.

Dr Esteban Marinho para Puedo Adelgazar